Redacción
Ciudad de México, 05 de agosto de 2025.- A pesar de que más de 3 millones de personas en la capital viven en unidades habitacionales, estas siguen operando en el abandono legal y físico.
La Comisión de Unidades Habitacionales y Régimen Condominal del Congreso capitalino convocó a una reunión con representantes de las 16 alcaldías para avanzar en el proyecto de una nueva ley de régimen condominal, la cual, según sus propios integrantes, es ya “urgente y necesaria”.
El presidente de la comisión, Omar García Loria (PRI), afirmó que se está realizando un trabajo de cruce de datos entre las alcaldías, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI) y ciudadanía.
El objetivo: presentar una propuesta de ley que permita regular, mantener y rehabilitar las unidades de interés social. Sin embargo, mientras el proceso avanza lentamente, la realidad en estos espacios empeora.
Entre los principales problemas que enfrentan estas viviendas están:
* **Falta de mantenimiento generalizado.**
* **Daños estructurales por sismos no atendidos desde 2017.**
* **Administraciones internas sin reglas claras.**
* **Falta de pago de cuotas de mantenimiento.**
* **Protocolarización costosa e inaccesible.**
* **Proliferación de comercios sin regulación en áreas comunes.**
Ante este panorama, se propone que las alcaldías destinen el 3.3% de su presupuesto anual a la rehabilitación y operación de estas unidades. Pero los enlaces de las alcaldías ya anticiparon que sin reglas claras ni áreas específicas dentro de las administraciones locales, ese dinero podría diluirse sin efecto real.
El secretario técnico de la comisión, Pavel Israel Zugaide Pimentel, indicó que el 25 de agosto es la fecha límite para validar los padrones y enviar observaciones, y que las primeras versiones de la iniciativa serán presentadas a partir de septiembre.
Mientras tanto, la vida diaria en muchas unidades continúa en medio del deterioro: sin seguridad jurídica, sin mantenimiento, sin acceso a servicios básicos eficientes**. Y aunque el Congreso promete avanzar, la realidad muestra que, por ahora, no hay ley, no hay orden y tampoco soluciones claras.
Una tercera parte de la ciudad no puede esperar más.














