Por Dana Rodríguez
Ciudad de México, 11 agosto 2025.- Morena presentó la Ley del Sistema Público de Cuidados como una propuesta de avanzada no solo a nivel nacional, sino continental. “Nuevamente la Ciudad de México va a la cabeza en América Latina”, declaró la diputada Xóchitl Bravo, al presentar la iniciativa respaldada por Clara Brugada.
Sin embargo, detrás del entusiasmo oficialista, expertos y colectivos feministas advierten que esta iniciativa no parte de cero: ya en 2017 la Constitución Política de la CDMX estableció el derecho al cuidado digno y al reconocimiento del trabajo doméstico no remunerado. A pesar de ello, ocho años después, no existe un sistema público real que garantice esos derechos.
“Esto ya está en la Constitución. Lo que falta es voluntad política para implementarlo con presupuesto, infraestructura y políticas claras”, declaró una investigadora del Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG-UNAM), consultada al respecto.
La diputada Martha Ávila, presidenta del Congreso capitalino, celebró que esta ley represente un paso para consolidar un marco jurídico más humanista y con visión social. Pero las críticas apuntan a que sin presupuesto multianual ni transversalidad institucional, esta ley podría ser apenas un gesto político sin impacto en la vida cotidiana de quienes cuidan y son cuidadas.
Los trabajos de cuidado no remunerados representan hasta el 20% del PIB nacional, según datos del INEGI. El reconocimiento formal sin políticas públicas sólidas podría convertirse en una forma de simulación que, en lugar de transformar la realidad, la maquille con discursos progresistas.














