Por Arturo Gutiérrez
CDMX, 01 septiembre 2025.- Detrás del discurso triunfalista de Mauricio Tabe por haber superado su meta de bacheo, se esconde una verdad incómoda: la alcaldía Miguel Hidalgo tuvo que activar un operativo exprés para resolver un problema que creció bajo su propia gestión. El anuncio de que se taparon 1,900 baches en tres semanas no es señal de eficiencia, sino de un rezago alarmante que apenas empieza a atenderse.
Durante gran parte de su administración, Tabe no presentó una política clara de mantenimiento preventivo de vialidades. Los vecinos de colonias como Anáhuac, Tacuba, Popotla y San Miguel Chapultepec han denunciado durante meses el deterioro de calles secundarias, sin recibir atención. ¿Por qué la urgencia justo ahora? ¿Se trata de una coincidencia de calendario o de una acción electoral anticipada?
Además, el hecho de movilizar a funcionarios y trabajadores de escritorio para cumplir una meta en tiempo récord habla más de improvisación que de planeación. ¿Dónde estuvo esa misma energía durante los primeros dos años de gestión?
Lo más grave es que, como el mismo alcalde lo admite, el problema no está resuelto. Los baches “siguen saliendo”, las avenidas principales siguen en mal estado y la coordinación con el gobierno central es nula. En lugar de colaborar para una solución integral, la alcaldía opta por deslindarse y hacer llamados públicos que solo exhiben falta de eficacia institucional.