Por Redacción
CDMX, 31 julio 2025 — Ante el creciente uso de teléfonos celulares en escuelas de educación básica, el Congreso de la Ciudad de México se dispone a regular su uso, una medida que ha desatado un debate entre padres, maestros, psicólogos y especialistas en derechos digitales.
La propuesta, impulsada por el diputado del Partido del Trabajo (PT), Ernesto Villarreal, argumenta que el uso desmedido de dispositivos móviles afecta el rendimiento académico, dificulta el desarrollo de habilidades sociales y deteriora la salud mental de los menores.
Citando estudios como el de Mauricio Calcaneo —»Redes sociales y salud mental: el acertijo regulatorio»—, Villarreal sostiene que hay evidencia preocupante sobre el impacto de las redes sociales en la autoestima y estabilidad emocional de los menores.
Sin embargo, la medida despierta críticas. Organizaciones civiles advierten que una regulación mal diseñada podría vulnerar los derechos de niñas, niños y adolescentes al acceso a la información, a la tecnología y a la comunicación. Además, algunos docentes sostienen que los celulares, usados de manera pedagógica, pueden ser una herramienta de aprendizaje poderosa.
¿Se trata de proteger a los estudiantes o de limitar su autonomía en nombre de la disciplina escolar? Mientras la discusión se intensifica, queda claro que la tecnología ha rebasado a las aulas, y que regularla sin caer en el autoritarismo es el verdadero reto.














