Por Arturo Gutiérrez
– El Congreso escucha, pero elude definiciones sobre tarifas, subsidios y sanciones
CDMX, 26 septiembre 2025.- En un nuevo intento por mantener el diálogo con el sector transportista sin asumir costos políticos, el Grupo Parlamentario de Morena en el Congreso capitalino organizó una segunda mesa de trabajo con representantes de rutas, bases y organizaciones como la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT). Las demandas, conocidas y reiteradas: aumento a la tarifa, eliminación de fotomultas, apoyos por el alza en combustibles y mejoras estructurales para el sector.
Los legisladores presentes —Xóchitl Bravo, Brenda Ruiz, Miguel Ángel Macedo y Pablo Trejo— escucharon con atención, tomaron nota, ofrecieron seguimiento, pero evitaron comprometerse con acciones inmediatas. A cambio, ofrecieron análisis, sistematización de propuestas y foros de consulta.
Morena apuesta por el trámite legislativo sin soluciones inmediatas
Desde su rol como presidenta de la bancada, Xóchitl Bravo fue explícita: no habrá promesas fáciles. “Para eso necesitamos conocer todo lo que están proponiendo. Somos responsables con el trabajo que hacemos”, dijo, en una declaración que, aunque sensata, también sirve para dilatar decisiones políticas clave.
En la misma línea, el diputado Miguel Ángel Macedo señaló que “varios temas han sido planteados en los foros”, entre ellos la electromovilidad, la seguridad peatonal y el mejoramiento de unidades. Aunque relevantes, estas temáticas desvían la atención del problema que más preocupa hoy al gremio: el alza urgente del pasaje para enfrentar los costos operativos.
Pablo Trejo, presidente de la Comisión de Hacienda, hizo énfasis en una propuesta integral ligada al análisis del Paquete Económico 2026. Su argumento: evaluar “ajustes sistemáticos y graduales”, sin especificar mecanismos o fechas.
Transportistas insisten mientras el Congreso gana tiempo
Los líderes del transporte concesionado salieron del encuentro con la misma exigencia: soluciones. Sin embargo, la respuesta del Congreso capitalino sigue siendo la misma: diálogo, mesas de trabajo y promesas de revisión.
En ese contexto, el Grupo Parlamentario de Morena logra contener las exigencias, pero no resuelve. El riesgo es claro: la paciencia del sector no es infinita y, sin resultados tangibles, la presión social podría volver a las calles.













